Los robots y la inteligencia emocional en el arte
¿Cómo usar la inteligencia artificial (IA) para un mundo mejor? Mucho se puede aportar desde el mundo del arte. Con una distancia social, estamos separados, mientras a nivel virtual el mundo demanda y consume arte en línea. Ahora es el mejor momento de plasmar y encontrar emociones en las obras artísticas, pero según estudios también para promover la evolución de la inteligencia artificial. Varios artistas coreanos, coincidieron, en una entrevista para una revista digital, en que fue una gran oportunidad combinar emoción de IA con un robot para preparar un nuevo futuro en el arte.
En 2017, la exposición especial “Hello Robot: Design Between Humans and Machines”, realizada por el Museo de Diseño Alemán: Vitra Museum, dio una idea del tema. Vitra es una empresa de muebles de renombre mundial, y la razón por la cual el Museo de Diseño planeó una exposición de robots ,es una señal de que los robots, en algunos países, se están volviendo cotidianos. Últimamente se ha hablado mucho de los robots coreanos, que son geniales. La cirugía robótica de largo alcance presentada por el profesor Kwon Dong-Soo en el Foro de Tokio, el año pasado, mostró una sorprendente posibilidad de cambio en el futuro cercano. La tecnología de los robots se usa rápidamente, cada vez en más lugares.
El equipo del profesor de KAIST Yang Hyun-seung desarrolló a finales de la década de los noventa, el primer robot móvil de inteligencia artificial de Corea, CAIR-1, para convertirlo en un sueño en la Daejeon Expo. Luego “dio vida” al humanoide AI (AMI, 2001), que se desarrolló posteriormente; el robot ya lograba comunicarse con las personas y expresar emociones. Luego el equipo del profesor Jun-ho Oh, HuBo presentó en 2004 al primer robot humanoide de dos patas.
Los robots son arte, además de tecnología y ciencia
Es discutible para algunos y controversial para una mayoría, pero cada día son más lo que piensan que es que justo al dar el paso de que la inteligencia artificial sea también emocional, una puerta que ha abierto paso a que se considere un arte.
Es hora de que la industria del arte preste atención activa a la combinación de IA y robots, y que el gobierno los apoye, según declaraciones de científicos de Corea, que están haciendo dicha solicitud. El artista Nam June Paik (considerado un genio en Oriente) creó el K-456, primer robot de artes escénicas en 1965, para ver la posibilidad de interacción mutua entre máquinas y personas al caminar por las calles de Nueva York. El cyborg de Lee Bul se convirtió en un precursor del arte coreano en el siglo XXI. La vida de la máquina de Choi Woo-ram nos hace pensar en la inteligencia vital más allá de la inteligencia artificial.
La combinación de la inteligencia artificial-emocional y robots artísticos llama la atención sobre la posibilidad incluso de psicoterapia. El robot de curación psicológica, llamado: Faro (2001), es un robot con forma de muñeca de foca fabricado por el Instituto Japonés de Tecnología Industrial, y se utilizó para psicoterapia mientras aprendía simpatía emocional con las personas. El robot doméstico presentado en la exposición de “Futuro y Arte” del Museo de Arte de Tokio Mori es un robot emocional que calienta su mente con solo mirarlo. Cuando la emoción AI y Art Toy se combinan, se abre un futuro infinito.
Los robots de los últimos años
Los humanoides Sofía (Hong Kong) y Orta (Japón) equipados con IA todavía tienen un sentimiento extraño, lo que dificulta la empatía. A algunos les puede llegar a dar miedo, pero la colaboración entre artistas e ingenieros es esencial para que los humanoides se acerquen a la belleza que evoca almas, como las esculturas griegas y romanas creadas por la cultura humana y la antifilosofía.
La IA emocional y los robots artísticos son el comienzo
Cada vez nos acercamos más al momento en que las artes, las ciencias y la tecnología estén activas en I + D. Aunque nunca dejaremos de abrazar profundamente a la humanidad pura como fuente de pasión e inspiración.
Fuente: Sun Seung-hye. Dirección del Museo de Arte de Daejeon.
